#2 Tu Segundo Cerebro: La clave para una vida y trabajo más eficientes

Welcome!

Buenos días a todos! Espero que hayan tenido una semana fantástica.

Hoy nos adentramos en la esencia de lo que quiero ir compartiendo con ustedes, pero antes de hacerlo, me gustaría expresar mi gratitud a las casi 20 personas que han decidido apoyar esta iniciativa. Sinceramente, no esperaba esta respuesta, GRACIAS!

Hoy les traigo un tema que me apasiona muchísimo y que, como mencioné en mi primer artículo, es uno de los conceptos en torno al que gira este espacio. Se trata de la construcción de un Segundo Cerebro digital.

Imagen generada con DALL-E representando la metamorfosis entre las neuronas de nuestro cerebro con los circuitos y bits de su homónimo digital.

En pocas palabras, lo definiría como un sistema organizado de almacenamiento y recuperación de información que amplía y complementa la memoria humana, optimizando el acceso a conocimientos y habilidades previamente adquiridos e interconectando distintas ideas y conceptos. Básicamente un sistema operativo para tu vida y tus proyectos.

Hub principal de mi Second Brain en Notion, un espacio vivo que voy adaptando según mis necesidades actuales.

El núcleo del asunto

Probablemente hayas experimentado momentos, tanto en el trabajo como en tu vida personal, en los que te has sentido abrumado tratando de localizar un documento, las instrucciones para hacer una tarea poco habitual que has escrito en un papel/libreta, una receta que te pasó un amigo por Whatsapp hace unos meses, la última revisión del coche o el itinerario de un viaje programado, entre otros.

Es normal. Somos humanos y nuestra memoria tiene sus limitaciones. Es por eso que tener un segundo cerebro digital, organizado de manera lógica y sencilla, nos permite ahorrar muchísimo tiempo. Y como ya sabemos todos, el tiempo en este planeta es limitado como para estarlo desaprovechando.

Los comienzos y el forjado de esta mentalidad

Los que me conocen saben que siempre he sido muy meticuloso con mis apuntes. Desde muy temprana edad, donde los resúmenes y esquemas del cole los guardaba como oro en paño en carpetas de cartulina con fasteners. Vamos, un show! Más adelante, durante mi etapa universitaria, mis apuntes daban alguna que otra vueltecita por la fotocopiadora de la uni. Y lo más curioso es que aquellos a quienes les cedía gratuitamente mis horas de dedicación asistiendo a las clases y pasándolos a limpio, a menudo obtenían mejores notas que yo (pero que conste que, aunque se encendiera esa chispita por dentro, me alegraba por ellos!).

Esta mentalidad, sumada al avance de las herramientas digitales multiplataforma (cloud-based) accesibles desde cualquier dispositivo, leer algún que otro libro como Construye tu segundo cerebro de Tiago Forte, y mis experiencias laborales en departamentos de operaciones tanto en organización de mantenimiento aeronáutico y aerolínea como servicios técnicos de maquinaría industrial; hicieron que se forjara aún más mi pasión por crear sistemas de gestión del conocimiento para manejar de manera rápida y eficiente la enorme cantidad de información que se mueve en torno a un avión (la regulación es bastante estricta) o dirección de empresas.

Para hacerse una mejor idea de lo anterior y para los más curiosos (que si estás aquí, entiendo que lo eres), un avión tiene unos cuantos sistemas y dentro de una compañía hay especialistas para cada uno de ellos cuyo trabajo es preservar la aeronavegabilidad (la aptitud del avión para el vuelo) dentro las pautas que marcan los fabricantes y reguladores. La particularidad de trabajar en operaciones (24 horas al día) es tener que lidiar con documentaciones de los distintos departamentos (sistemas, motores, interiores, estructuras, etc.) y, al mismo tiempo, tomar decisiones rápidas bajo presión para evitar cualquier retraso en la operativa. Y es aquí donde es esencial tener un segundo cerebro que permita a un equipo multidisciplinar trabajando en diferentes turnos estar sincronizados y tomar decisiones bien fundamentadas.

Representación generada con DALL-E de una sala de control de operaciones de aerolínea.

Herramientas y métodos

Actualmente en el mercado existen muchas herramientas y métodos para construir un segundo cerebro digital. Algunas de las más populares incluyen aplicaciones de productividad personal como Evernote, OneNote, Google Keep, Notion, Obsidian, Taskade o Roam, entre otras. Cada una de ellas tiene sus propias características y funcionalidades únicas, por lo que la elección de una u otra dependerá del objetivo concreto de cada uno y también de las herramientas que ya se están utilizando en vuestros procesos. Mi favorita y, bajo mi punto de vista, la más completa actualmente es Notion, pero nunca se sabe si cambiaré de opinión en el futuro.

Conjunto de herramientas que utilizo en torno a Notion. Diseño propio.

Es importante tener en cuenta que las herramientas de productividad digital se actualizan y evolucionan a un ritmo acelerado, más con la llegada de la inteligencia artificial generativa. Eso significa que una herramienta que es perfecta para tus necesidades hoy, puede que más adelante no lo sea del todo porque hay otra que ofrece mejores opciones para tu workflow (flujo de trabajo). Además, una vez comienzas a crear sistemas dentro de una herramienta, puede ser complejo (no imposible!) transferir toda esa información a una nueva herramienta.

Sin embargo, en el futuro, con la llegada de las aplicaciones basadas en blockchain, este proceso de transferencia y adaptación a nuevas plataformas pienso que se podría simplificar considerablemente. Con estas tecnologías tan disruptivas, nuestro perfil digital, incluyendo todos nuestros datos y sistemas de organización, se podrán migrar y adaptar a una nueva plataforma con mucha menos fricción (Spoiler 1: profundizaremos en un artículo futuro para compartir mi visión sobre ello. Es increíble lo que se está construyendo en torno a cripto/blockchain y el cambio que genera en la creación de valor online con economías tokenizadas, NFTs, etc).

Para ir cerrando

Adoptar esta mentalidad y ponerla en funcionamiento no es algo que suceda de la noche a la mañana, al menos si lo haces solo. Sin embargo, con un buen asesoramiento de una persona que tiene una visión más amplia y que lo ha encarnado en su vida personal e incluso en las empresas donde ha estado, ayuda enormemente a reducir esos plazos.

Como comenté anteriormente, el objetivo final no es otro que liberarnos de carga mental, ganar tiempo de valor (Spoiler 2: en un futuro articulo os hablaré del concepto Slow Productivity o Productividad Lenta, estoy leyendo estos días sobre ello) y alcanzar los objetivos que nos propongamos, preservando y actualizando uno de los bienes más valiosos que tenemos: nuestro conocimiento.

Mi deseo es que puedan aplicarlo en vuestra vida diaria/estudios/negocio, y obviamente ver cambios positivos como resultado. No importa si eres avispado con la tecnología o te cuesta un poco más, con constancia todo se aprende, nuestro cerebro es neuroplástico y puede siempre cambiar y adaptarse para aprender nuevos conceptos (es como un trozo de plastilina, moldeable en múltiples formas).

Y tú, ¿haces uso de un Segundo Cerebro actualmente? Si es así, ¿en qué áreas y qué herramientas empleas? De lo contrario, ¿dónde sientes que te sería de gran ayuda?

Agradecería enormemente vuestro feedback, y estoy pensando que si llegamos a los 40 suscriptores, organizaré una masterclass exclusiva para todos los integrantes donde presentaré casos reales y aplicaciones prácticas de lo comentado. Muchas gracias por vuestro tiempo y feliz fin de semana!

Si aun no estás suscrito, no olvides hacerlo para estar al tanto de las próximas ediciones y compartirlo con todas aquellas personas que crees que podrían inspirarse también.

Hasta entonces, mantén viva tu curiosidad, sigue aprendiendo y, sobre todo, disfruta del proceso. ¡Nos vemos en la próxima edición de brainSynchro!